¿Ahora, qué enseña jnana marga? Enseñamos simplemente esto: no aceptes nada a menos que puedas demostrarlo. No creas nada a menos que puedas usarlo por ti mismo y puedas ver que es verdad. Hacer afirmaciones, mantras, ejercicios de yoga, etc.., no te despertarán.
Empiezas desde el principio. Tú simplemente te admites a ti mismo que existes. Esta es la verdad. ¿Existes, no es verdad? Así te dices a ti mismo, "Yo existo".
Conozco esto con seguridad. Yo existo. Esto es todo lo que sé. Soy ignorante de toda otra cosa, pero yo sé que existo porque aquí yo soy." Y, cuando te mantengas diciéndote esto, "Yo existo", comienzas a poner más espacio entre "Yo… existo". Deciros eso a vosotros mismos: "Yo… existo…, Yo… existo."
Si haces esto correctamente, pronto encontrarás que "yo" y "existo" son dos palabras separadas. En otras palabras, vendrás a la conclusión que tú existes como "Yo". Tendrás que preguntarte, investigar, ¿Quién es este "Yo" que existe ¿Qué es Yo?
Nunca respondas. Vendrá a ti por sí mismo. Cuando duermes y despiertas, dices, "Yo dormía". Y cuando estás despierto, por supuesto, dices, "Yo estoy despierto". Pero ese "Yo" está siempre allí.
Empiezas a indagar dentro de ti mismo, ¿Qué es este "Yo" que existe todo el tiempo? Existe cuando estoy dormido, cuando estoy despierto, cuando sueño. ¿Quién es este "Yo"?
Y ahora la indagación empieza. "¿De dónde viene este "Yo"? ¿De dónde vino el "Yo"?"
Y esperas un poco, y repites la misma pregunta, ¿De dónde viene el "Yo"?
Mientras haces eso, sigue el "Yo" profundo, profundo dentro. Te mantienes siguiendo el "Yo". Vas más profundo y más profundo dentro del "Yo".
¿De dónde viene este "Yo"? ¿Quién es este "Yo"?
Cualquier respuesta que venga a ti es la respuesta equivocada. No la aceptes pero no la niegues. Simplemente déjala a un lado. Y continúa con la auto-indagación. "¿Quién soy "Yo"?"
Y espera. Y pregunta de Nuevo, ¿Quién soy Yo"? No es un mantra. ¿De dónde vino el "Yo"? ¿Cómo llegó allí? ¿Quién le dio nacimiento? ¿Cuál es la fuente del "Yo"?
Continua morando en el "Yo".
Cuando continuas este proceso algún día algo sucederá. A algunos les viene como una explosión dentro, donde todos tus pensamientos son borrados.
Para que veas, "Yo" es el primer pronombre y cada pensamiento que tienes en el mundo está atado al "Yo." Estos son secundarios. Piensa en eso. Cualquier cosa que digas sobre ti mismo tiene "Yo" en ella. Todo en el mundo trata sobre ti mismo. "Yo" voy al cine. "Yo" voy a jugar a los bolos. "Yo" tengo ganas de llorar. "Yo" me siento terrible. "Yo" me siento maravilloso. "Yo" me siento enfermo. "Yo" me siento bien. Hay siempre un "Yo", "Yo", "Yo."
¿Qué es este "Yo"?
Todas las cosas están apegadas al "Yo". Subsecuentemente, cuando el "Yo" es borrado, todo lo demás es borrado y los problemas se terminan. Todos los pensamientos van con el "Yo".
Ahora, no hay respuesta a "¿Quién soy Yo?".
Cuando obtengas la respuesta habrá vacuidad, un vacío. Serás lo no nacido. Pero no es un vacío como tú piensas. No es vacuidad como piensas. A falta de una palabra mejor puedes llamarlo, bienaventuranza, nirvana, sat-chit-ananda, dicha, consciencia, realidad absoluta. No importa que nombre le des. Devendrás eso y no habrá explicación. Tan solo devendrás eso y sentirás una profunda paz que nunca has sentido antes. Sentirás una dicha que es incalificable. Intentarás explicártelo a ti mismo y a tus amigos pero no puedes. Porque lo finito no puede comprender lo infinito. No hay palabras.
Este es el método. Autoindagación. Sigues el pensamiento "Yo" a su fuente. ¿Cuánto tiempo lleva? Depende de ti mismo. De cuán sincero eres, de que otras cosas haces con tu vida. Si usas esto como haces cualquier otra cosa...
Por ejemplo, si dices: "Bien, hoy voy a practicar el pensamiento "Yo", luego voy a ir a la bolera, luego voy a ver la televisión, mañana haré lo mismo". ¿Qué va a pasar en un caso como ese? Muy poco. Pero si pones tu energía en ello y practicas a cada oportunidad que tengas y pones esto lo primero en tu vida, verás resultados sorprendentes. Pero tienes que ponerlo lo primero en tu vida.
Piensa justo ahora. ¿Qué es lo primero en tu vida? No me lo digas sino tan solo piensa. ¿Qué viene primero en tu vida? ¿Puedes llevarlo contigo cuando mueras? ¿No ves ahora que vives en un mundo de cambio constante? Que la única cosa permanente en la vida es el cambio. Todos los hechos cambian. Solo la verdad es real. Y la verdad es personal.
Tienes que encontrarla por ti mismo. Un devoto o estudiante sincero pondrá esto primero en su vida y luego él o ella empezará a ver resultados. Pero si todavía estás preocupándote y temiendo algo y piensas que otras obligaciones vienen primero, entonces tienes que trabajar en ti mismo.
Esto es por lo que, con gran compasión, te doy ciertas cosas que puedes hacer antes que entres en la Autorealización. Justo antes de que devengas autorealizado empiezas a sentir ciertas cosas. Y son los cuatro principios que te di la semana pasada. Vienen automáticamente a ti. Pero, como mencioné el último domingo y jueves, sobre el despertar, tienes que devenir consciente de esos principios. No puedes pensar en ellos solo en tu tiempo libre. Tienes que arreglarte para persuadir a la mente. Tienes que persuadir a tu mente a pensar en los cuatro principios tan pronto como abras los ojos por la mañana.
Así pues tienes que hacer dos cosas. Cuando abras tus ojos puedes preguntarte, ¿De dónde vino el "Yo"? ¿Quién soy Yo que durmió la noche pasada? ¿Quién soy Yo que acabo de despertar? ¿Quién soy que existe ahora?
O puedes pensar en los cuatro principios. Lo que sea conveniente para ti. Pero si deseas la Autorealización, y deseas devenir libre, y deseas liberarte del océano del samsara, y devenir dichoso, entonces depende de ti. Puedo compartir estas cosas contigo pero no puedo hacerlas por ti. Es igual que llevarte a una mina de oro: tú tienes que cavar por ti mismo.
¿Qué viene primero en tu vida? Lo que sea primero en tu vida, eso es lo que devienes. Al final vas a tener que dejar tu cuerpo, tus pensamientos, tus posesiones, tus seres queridos. Al final vas a dejar todo. La persona sabia busca la verdad ahora, e intenta devenir libre ahora.
Los cuatro principios a los que Robert se refería son:
- Tienes un sentimiento, una comprensión completa, de que todo lo que ves, todo en el universo, en el mundo, emana de tu mente.
- Tienes que tener un fuerte sentimiento, una profunda realización, de que eres no-nacido. No has nacido, no experimentas una vida, no desaparecerás, no mueres.
- Eres consciente, y tienes una profunda comprensión, de que nada tiene ego.
- Tienes una profunda convicción, una profunda comprensión, un profundo sentimiento de lo que realmente es la Autorealización de la noble sabiduría.
Tan pronto como abras tus ojos por la mañana tienes que decirte, "Siento, me doy cuenta y comprendo, que todo, todo (di todo dos veces), es una proyección de mi mente". Y piensa en lo que eso significa. Olvida los otros tres. Trabaja en eso.
"¡Todo! ¡Todo! siento, me doy cuenta y entiendo que todo es una proyección de mi mente."
Y luego puedes pensar en los problemas que tengas, si tienes alguno, y decirte, "¿Si todo es una proyección de mi mente, de dónde vienen estos problemas?"
Entonces comprendes: "Porque vinieron de mí. Los proyecté. Los creé." Y entonces dices: "¿Quién es este Yo que los creó?" ¿Ves? Ahora estas llegando a la parte jugosa, a la sustancia.
"¿Quién es "Yo" que creó toda esta ilusión en mi vida? ¿De dónde viene? ¿Quién le dio nacimiento?" "Mi mente." "¿De dónde viene mi mente? El "Yo" ¡Porque ambos son lo mismo!" El "yo" y mi mente son lo mismo. Y es toda una revelación.
Piensa de este modo: "¿De dónde viene la mente/yo y a quién viene?"
Y profundiza, profundiza dentro de ti mismo. Si lo haces correctamente, comprenderás que no hay ningún "yo", no hay mente, de modo que no hay problema y se acabará, empezarás a reírte. Realmente empiezas a reírte de ti mismo.
Dirás, "Pensar que yo temía esto y temía eso". Y una vez que entras en esa consciencia algo sucederá, que de hecho te aliviará físicamente de tu problema, o de lo que pienses que es un problema.
En tanto creas que en tu mente hay un problema, sea pequeño o grande, no importa, ambos son lo mismo, en tanto que crees que tienes un problema, tendrás un problema y crecerá. No podrás cambiarlo. Puede parecer que lo cambias, pero cuando pruebas a trabajar con el problema mismo, se vuelve en otra cosa de peor naturaleza. Nunca pruebes a trabajar con el problema. En lugar de eso, pregúntate de donde vino el problema.
"¿Cómo lo obtuve? ¿Cómo obtuve este nacimiento? ¿De dónde vino?"
Ese es el problema. El nacimiento es el problema. Porque crees que naciste tienes el problema y puedes seguir y seguir.
Eso es como tienes que trabajar con los principios:
"¡Todo! Siento y comprendo que todo es una proyección, una manifestación de mi mente." "¿La mente de quién?" "Mi mente"
¿Quién es "mi", "mío", "Yo"? ¿Quién soy "Yo" que tiene este problema?
Y al tiempo que te haces esta pregunta, comenzarás a sentirte mejor y mejor. Realmente comenzarás a sentirte mejor, y como te sientes mejor, el problema se hace menos y menos importante y se desvanecerá. Esto es una gran psicoterapia. Funciona. Si los psiquiatras dieran esto a los pacientes, no tendrían que darles ningún fármaco.
Entiendes, sientes, que todo es una emanación de tu mente, o no existiría. Toda existencia, desde el más pequeño átomo a la galaxia cósmica más grande, sale de tu mente.
Puede que digas, "El sol es real".
Puede que digas, "Bien, Dios es real".
Puede que digas, "Un átomo es real".
Pero no comprendes que tú estás creando estas cosas. Todas son una proyección de tu mente. Si no tuvieras una mente, no tendrías estos conceptos. No mente, no conceptos. Todas estas ideas vienen cuando comienzas a darte cuenta de que todo es una proyección de tu mente.